En la actualidad, y debido al auge o afición al Gin tonic, han proliferado los locales especializados en este tipo de combinados, catas, y por supuesto, supuestos “expertos” que opinan sobre cual es la mejor combinación para elaborar el gin tonic perfecto.
Lima, limón, pepino, moras….la elección dependerá de muchos factores, no a todas las ginebras les va el mismo tipo de tónica, y según su composición, se apostará por combinarla con cítricos, pepino o incluso frutas del bosque o canela.
Una opción no es mejor o más “chic” que la otra, simplemente, por la composición de la propia ginebra, por los ingredientes utilizados en su elaboración, será conveniente que la mezclemos con uno u otro producto.
A continuación os damos unos consejos para que podáis investigar e ir probando combinaciones:
- Si se opta por una ginebra seca, la tónica que debe acompañarla debe ser Premium o doble azucarada. Es decir, contienen el doble de proporción de azúcar que una tónica normal. Así se compensa su sabor más amargo.
- Para saber cual es el maridaje perfecto para una ginebra, un truco, leed su composición. Así, podemos apostar por potenciar la fruta o especia predominante en ella; o bien, podemos decidir hacer todo lo contrario, introducir un elemento externo, y así darle un sabor más personal y original.
- Prepara tu cóctel en copa de balón, para que así respire tanto la ginebra como la tónica, y además, se pueda disfrutar de sus aromas.
- Un elemento muy importante y al que se le da poca importancia es el hielo. Éste debe ser consistente, o rápidamente se aguará y estropeará toda la mezcla.
- La tónica hay que echarla poco a poco, lentamente. Así se permite que se vaya uniendo la mezcla sin romper las burbujas de la tónica.
- No hay que excederse con la cantidad de alcohol. No a más ginebra, el gin tonic nos sabrá mejor.
- Si abusamos de zumo de limón u otro cítrico, estropearemos el gin tonic, puesto que matamos el gas carbónico de la tónica.
- No te dejes llevar por las modas. Innova, prueba y decide cuál es tu combinación perfecta. Cada uno tiene la suya. Lo importante es disfrutar.
Una vez dicho esto, las posibilidades son casi infinitas, por la gran cantidad de ginebras y de tónicas diferentes en el mercado.
La gracia está en combinarlas entre ellas y luego añadir algún toque original, eso sí, siempre atendiendo al sentido común, y a la propia esencia de la ginebra.